jueves, 6 de junio de 2013



                                       Esténcil- hollín sobre vidrio- fondo p/madera  Ø42 cm- 3/3


 Hollín sobre vidrio/ fondo rojo -  Ø42 cm - 2/3

                                         
                                    Esténcil / hollín sobre vidrio con fonfdo blanco / Ø42 cm - 1/3
Tp N° 6


      El rectángulo se rompe y el humo se expande; la composición domina  otro espacio.


Es estos trabajos se puede ver claramente un quiebre dentro del proceso, tanto de la técnica como del formato y el desplazamiento de las piezas en el espacio como parte de la composición.

El trabajo consta de tres piezas circulares, los soportes son de vidrio y tienen distinto  color de fondo. La herramienta principal en estos trabajos es la Antorcha y el uso de esténcil.

“Aquella pequeña mancha, ya no responde a un circuito lineal como aquellos puntos que se desplazan con cada impulso insistente. No se ocupa de recorrer el espacio una y otra vez  si llenarlo. Porque tiene otra fuente; el entramado desaparece de sus posibilidades; el humo brota de antorchas que se deshacen envolviéndolo todo, yendo hacia la superficie donde choca y se escurre por sus límites, dejando rastros y huellas…”


                                             Análisis

 De la línea a la macha

Una vez terminado el trabajo, y luego de una evaluación con respecto los anteriores, (sobre todo al Tp N° 5) me di cuenta de los cambios fundamentales en el desarrollo; el quiebre que significó   abandonar la línea y controlar la mancha desde otra técnica.
La forma de entender o interpretar  la conexión entre soporte y herramienta dentro de cada pieza, comparada con la de trabajos anteriores,  no subyace en la idea del dibujo lineal y de la trama (el punto que genera la llama de la vela, y que se desplaza por el espacio) sino en la acción de la mancha de hollín proveniente de otra fuente, de su capacidad para afectar la totalidad de la superficie  y del control de la misma
.
Dentro y fuera

La impotencia de la línea frente al soporte ya no tiene lugar, ahora ambos factores actúan de forma recíproca; la mancha es contenida en un círculo, y a su vez, el círculo contiene y delimita la mancha. Esta estrecha ambivalencia en la subordinación desaparece al poner en relación cada pieza dentro de otro espacio a través del montaje, en donde funcionan como un conjunto.

Técnica

Si bien los resultados varían según el tiempo y la densidad del humo, la mancha actúa desbordando los límites del soporte, de modo tal, que para contener y dominar esas manchas, tuve que recurrir al esténcil como técnica básica para componer y ordenar los efectos que se generaban.
Entonces ya no tuve que ocuparme en realizar movimientos precisos y de tipo balísticos para dominar el modo de incidir sobre el vidrio y generar cierto tipo mancha. Como en este caso el soporte debía quedar fijo, los resultados dependían mucho más del tiempo que del movimiento.

Luego de experimentar sobre estas cualidades, decidí realizar composiciones geométricas elementales que evidenciaran  la diferencia de valores y texturas visuales, con excepción  del que tiene  fondo rojo, donde  claramente se aprecia el carácter incorpóreo de la huella de humo. En este caso utilice la herramienta,  como en los trabajos prácticos anteriores; con un contacto directo y sin intervenciones, por esa razón, y a diferencia de las demás piezas,  se puede apreciar  una gran sutileza y frescura en la calidad de la mancha.

martes, 4 de junio de 2013

Tp N° 5


 
                                        Hollín sobre vidrio con fondo gris- Tríptico. 20 x 80 cm c/u
             

En este trabajo decidí aumentar la escala, para ello, y por razones prácticas de traslado, dividí el soporte en tres partes conformando un tríptico. Obviamente la idea de tríptico no corresponde ni opera en base a la composición, la cual está conformada por un entramado de líneas que recorre indistintamente las partes.
La técnica es la misma que utilicé en trabajos anteriores, solo que al aumentar la escala del soporte tuve que forzar los trazos para generar una línea más gruesa, lo cual me llevó a recorrer de forma reiterada cada línea.

                        Este reajuste técnico trajo algunas consecuencias en el acabado:

·           * Se perdió la sutileza en la variación de los valores.

·          * La insistencia en el control de la línea le dio un carácter un poco más rígido.

·          * Si bien el juego de transparencias y superposiciones es evidente, no se desenvuelve dentro de una atmósfera de delicadeza como tenía pensado. El carácter formal de la línea adopta tal fuerza que se impone ante la profundidad y la ambigüedad del entramado de humo, volviendo la composición más rígida.
                                                                 

Al cambiar la escala, naturalmente las complicaciones técnicas de dibujo y los resultados, me obligaron a salirme de las posibilidades gráficas que hasta ahora conocía a través de  la vela (anuque seguramente es una cuestión de práctica, porque al funcionar como líneas, dudo que tenga limitaciones) y pensar cómo conseguir  ampliar o alterar la forma de manchar con hollín a través de otro tipo de herramientas. Me imaginé que haciendo una antorcha podría seguir “dibujando”  sobre el vidrio, pero  el resultado fue diferente, las manchas se abrían demasiado. Pero no dejó de interesarme su resultado, que era el de una mancha realmente incontrolada y dispersa. Entonces decidí concretar con lo que ya más o menos dominaba y conocía.